En los años 50, la capital de Japón fue atacada y casi destruida por Godzilla. Desde entonces, Japón ha disfrutado de un gran periodo de paz, pero esa paz se ve alterada cuando un submarino del ejército japonés detecta una extraña silueta en el fondo del mar que recuerda a Godzilla. Nadie acepta tal posibilidad, excepto el Comandante Tachibana quien, en su niñez, fue testigo del ataque de Godzilla, por lo que no descarta el regreso del monstruo atómico.

Lo más fuerte del Geshoushuu, la armada Kusare Gedoushuu ha invadido nuestro mundo. Su líder es Aburane Menpuku quien luchó en el pasado contra el primer Shinken Red, el cual pudo sellarlo hasta el día de hoy. Los Shinkengers no parecen encontrar una manera de ganar y por ello Jii les cuenta de un disco que es su carta de triunfo para este encuentro. *Ocurre entre los episodios 22 y 23.

Unos cazatesoros descubren una enorme bola blanca que resulta ser un huevo de Mothra, el dios guardián del Cosmos. Los investigadores deciden llevar el huevo a Japón, pero Godzilla, que ha despertado de su letargo debido al impacto de un meteorito gigante que cayó en la fosa del Pacífico donde dormía, sale a su encuentro... ¿Podrán los humanos sobrevivir a esta terrorífica lucha entre monstruos?...

Sayaka trabaja en una oficina. No es muy buena en su trabajo y tiene una vida solitaria y monótona. Una noche, un joven llamado Itsuki aparece agotado frente a su casa. Sayaka le deja entrar y a partir de ese momento comienzan a vivir juntos. Itsuki le prepara la comida y van juntos a recoger hierbas silvestres. Él, a pesar de que se ve como una persona alegre, esconde un secreto.

Takaraishi Miki es una oficinista de 24 años. Se graduó como la mejor estudiante de la Universidad de Tokio y también ganó el título de Miss Campus, lo que la hizo aparecer como la chica "perfecta" con inteligencia y apariencia. Sin embargo, su mayor defecto es su fea personalidad de la que no se da cuenta. Un día, su novio, que aspira a convertirse en político, la abandona, lo que lleva a Miki a convertirse en política para vengarse de él.

Kaneko Teppei es un joven japonés normal y corriente. Trabaja a tiempo parcial, hace vida en Tokyo e intenta descubrir qué le espera en la vida. Finalmente, tras armarse de valor para ir a su primera entrevista de trabajo, es acusado por una joven colegiala de haberla manoseado en el metro. Él proclama su inocencia desesperadamente, pero a la policía sólo le interesa forzarle a hacer una confesión falsa, pagar una multa y cerrar rápidamente el caso. Antes de que se dé cuenta de lo que está pasando, su persistencia en afirmar su inocencia le sumirá en una odisea kafkiana de burocracia judicial.

Ayumi, una limpiadora del hospital, llama de pronto al joven doctor genio para decirle que está embarazada de él. Él, un impenitente mujeriego, se toma la noticia a broma dado que es el Día de los Inocentes, lo que acarreará consecuencias insospechadas. Mientras, un chico intenta por todos los medios contactar con un ovni que lo devuelva a donde pertenece, que desde luego no puede ser el instituto donde lo acosan. Por otra parte, un matrimonio mayor recorre aristocráticamente la ciudad, una niña es secuestrada, un policía detiene a una vidente... Una película coral donde todas las historias acaban relacionándose de forma sorprendente, y que transcurre enteramente en un muy loco y divertido Día de los Inocentes.

Ambientada en Japón, durante los primeros años de la Era Showa (1932). Un trío de karatekas de un pequeño dojo, ubicado en los bosques del centro de Kyushu, están bajo la tutela del anciano maestro llamado Eiken Shibahara. Entre ellos se debaten el Kuroi Obi, que designará al sucesor del dojo. Choei, Taiken y Giryu se enfrentan a una compañía de la policía militar Kenpeitai, que ha llegado a requisar su dojo para usarlo como una base militar.

Hiroshi se hace daño en la espalda al intentar jugar a los robots con Shin Chan. Misae le regaña por hacer el bruto en lugar de ocuparse de las cosas de la casa. Molesto y dolorido, Hiroshi decide ir al médico, pero se lo encuentra cerrado. A la vuelta, se encuentra con una misteriosa mujer que le ofrece un masaje gratis en un nuevo centro de estética. Hiroshi acepta, pero cuando el masaje termina y vuelve a casa, descubre que se ha convertido en un robot. Misae no se cree que sea el verdadero Hiroshi: no le deja entrar en casa e incluso avisa a la policía. Pero cuando estos investigan, el centro de estética donde le dieron el masaje a Hiroshi se ha desvanecido en el aire. Después de que Hiroshi-robot salve a Shin Chan y a sus amigos de un terrible accidente, Misae le acepta como al verdadero Hiroshi y parece que todos vuelven a vivir felices hasta que la misteriosa mujer vuelve a aparecer ante Shin Chan y le entrega un bigote que cambiará por completo la personalidad de Hiroshi-rob.