Alex Tyree (Thomas Jane), un ranger de Texas, es reclutado por los servicios de inteligencia británicos, dirigidos por Geddes (John Malkovich), para localizar a un peligroso terrorista e impedir que detone una bomba radioactiva en el centro de Londres.

Años después de que una misteriosa plaga ha devastado el planeta y transformado a la mayoría de la humanidad en criaturas sedientas de sangre, un vagabundo transformado en un vengador se encuentra con un grupo de sobrevivientes en una estación de policías abandonada y acepta intentar ayudarles a defenderse y escapar al santuario que buscan desesperadamente.

Quien hace tiempo fuera la sensación de la ciudad, Liam Case (Gooding, Jr.), ahora es un hombre olvidado, un héroe cuya fama le ha abandonado. Con la esperanza de recuperar su antigua gloria, intenta frustrar un atraco a un banco, pero resulta tiroteado. Mientras se recupera de sus heridas, Liam jura venganza y empieza la cacería por su cuenta, llegando a un impactante momento culminante que confirma el viejo proverbio: los héroes no nacen, se hacen.