Un grupo de mujeres británicas, australianas y holandesas son capturadas en Singapur en febrero de 1942 por el ejercito japonés, cuando el país del sol naciente invade Singapur y Australia. Durante toda la serie vivimos las aventuras, experiencias y relaciones entre este grupo de mujeres y sus vigilantes japoneses.

Wicky es un limpiador profesional de escenas del crimen. Cuando los detectives de policía han hecho su trabajo, él entra armado con lo último en productos de saneamiento y se pone manos a la obra para eliminar hasta la última mancha de sangre. Su trabajo le pone en contacto cada día con la gente más variopinta: los que conocían a las víctimas, los que creían conocer a las víctimas y, en ocasiones, incluso los mismos asesinos de las víctimas. Pero su personalidad charlatana, inocente y extrovertida le lleva a pasar más horas cotilleando que limpiando, llegando a conocer las historias más rocambolescas y, también, humanas. Limpiar la ciudad es tarea de la policía, pero limpiar la escena del crimen le toca al bueno de Wicky.