Cinco episodios sobre el amor, dirigidos por conocidos directores. François Truffaut, en "Antoine et Colette", trata de un inocente amor entre un joven y una mujer madura. Renzo Rossellini sigue las andanzas de dos mujeres que comparten un amante. Shintaro Ishihara ofrece un violento retrato de un joven perturbado que se convierte en asesino de mujeres. El episodio de Marcel Ophüls (hijo del gran Max Ophüls) se centra en un periodista que, tras un breve encuentro, deja a una mujer embarazada y tendrá que afrontar su responsabilidade como padre. El episodio dirigido por el polaco Andrzej Wajda habla de un joven soldado cuyas hazañas provocan la admiración de una mujer.

Un par de espadachines con mala suerte llegan a una ciudad polvorienta y azotada por el viento, donde se ven envueltos en una disputa de clan local. Uno, que anteriormente fue granjero, anhela convertirse en un noble samurái. El otro, un antiguo samurái atormentado por su pasado, prefiere vivir en el anonimato con gánsteres. Pero cuando ambos hombres descubren las malas acciones del infame líder del clan, se ponen del lado de una banda de rebeldes que están sitiados en una remota cabaña en la montaña.

Japón, 1860. Los hombres del clan Mito, víctimas de la purga de Ansei, merodean ansiosamente en torno a la puerta Sakurada del castillo de Edo con la intención de asesinar a Naosuke Ii de Hikone, tairō del shogunato Tokugawa y responsable de su desgracia.

Después de ser secuestrada por tres jóvenes, una anciana multimillonaria consigue dominar la situación con gran habilidad e inteligencia, manipulando a su antojo a sus captores y logrando dividirlos y enfrentarlos.

Esta impresionante historia épica ha sido a veces etiquetada como la versión japonesa de "Lo Que El Viento Se Llevó". Chusha Ichikawa personifica a un señor feudal poderoso y despiadado que lucha contra el virtuoso y joven noble, Yuzo Kayama. Ichikawa encuentra una victoria parcial cuando engaña a Kayama y lo convence de hacerse el Hara Kiri. La venganza será realizada por los cuarenta y siete samuráis de Kayama. Basada en una leyenda japonesa venerable, la historia de Chushingura ha sido filmada en varias ocasiones, pero sólo la versión de 1941 (47 Ronin) estuvo a la altura de la versión de 1962, del gran director Hiroshi Inagaki.