Un individuo de malos sentimientos y peores acciones, dispuesto a todo con tal de satisfacer su avaricia y vanidad, se muestra descontento con el papel de Judas que encarna en la pasión, una obra dramática que tradicionalmente se representa en su pueblo durante la Semana Santa. Él aspira a interpretar a Jesús, por lo que hará lo posible para hacerse con el papel protagonista.

Una mujer frívola y propietaria de unos terrenos en los que se han instalado unas humildes chabolas, decide un día venderlos.