Relato sobre las cicatrices de la Segunda Guerra Mundial en el que un grupo de soldados japoneses han sido encarcelados como criminales de guerra.

Noriko es una mujer casada que todas las semanas se mueve entre Tokio, donde dirige la joyería familiar, y su casa en la costa. Su marido lleva enfermo durante un tiempo y necesita permanecer convaleciente en cama. Él fue soldado durante la guerra, y en los siete años que llevan de matrimonio han pasado poco tiempo juntos. En su trayecto entre Tokio y Ajiro, Noriko conoce a un joven doctor, quien casualmente asume el tratamiento de su marido. El encuentro con este despreocupado y vibrante hombre le ayuda a recuperar la alegría de vivir perdida tras tantos años de cumplir con sus obligaciones de devota esposa.

Una pareja de ancianos viaja a Tokio para visitar a sus hijos, pero ninguno de ellos tiene tiempo para atenderlos, por lo que deciden enviarlos a un balneario. Cuando regresan, la madre pasa una noche en la casa de una nuera, viuda de uno de sus hijos. A diferencia de sus cuñados, Noriko muestra afecto por sus suegros y conforta a la anciana.