La de Frankie Heck es una familia de libro: tiene un hijo adolescente que se pasa el día en su cuarto y cuando se pasea lo hace sin camiseta ni pantalones; una hija que es un desastre en casi todo lo que intenta; y otro chico, el pequeño, que repite las últimas palabras en susurros porque le hace sentir bien. Además, intenta vender coches cuando su marido no se olvida de ir a recoger a los chicos al colegio.

Carly es una estrella cibernética de 13 años que se dio a conocer a través de la página web que creó con unos amigos. La joven, a pesar de su popularidad, intenta aprender a llevar una vida normal.

Jess (Zooey Deschanel) es una chica adorable que acaba de romper con su novio, así que en un cambio de rumbo decide irse a compartir piso con tres atractivos chicos en busca de una nueva y diferente vida. Pero, ¿será la convivencia correcta vivir con tres solteros?

Bryan (Andrew Rannells) y David (Justin Bartha) son una feliz pareja gay que vive en Los Ángeles, con carreras exitosas. Lo único que falta en su relación es un bebé. Se encuentran con Goldie Clemmons (Georgia King), una madre soltera y camarera de Ohio. Goldie dejó a su marido adúltero y se mudó a Los Ángeles con su hija Shania (Bebe Wood) de 9 años para escapar de su vida anterior y comenzar de nuevo. Jane (Ellen Barkin), la abuela conservadora de Goldie, los sigue a la ciudad en contra de los deseos de Goldie, causando estragos en su nieta y la pareja. Goldie decide convertirse en el sustituto gestacional de Bryan y David y, naturalmente, su familia se involucra.