Yeoh es una joven inspectora que colabora con un ex-policía japonés y un agente de seguridad aérea para desbaratar un intento de secuestro de un avión que se traduce en la muerte de varios asaltantes. A su llegada a Hong Kong los tres son recibidos como héroes y dan por zanjado el asunto, pero pronto se convierten en blanco de unos brutales veteranos de guerra dispuestos a a todo para vengar a sus camaradas muertos. Cuando varios familiares y colegas son asesinados, el trío de héroes se lanza a la persecución de los criminales para poner fin a su sanguinaria venganza.

William Luk de Anti-Corrupción y Lau Po-Keung, de Inteligencia Financiera, están investigando cada uno por su lado un mismo caso de lavado de dinero sin llegar a una pista definitiva. Una denuncia que llega a asuntos internos entorpecerá aún más la investigación del caso.

Kevin es un policía de Hong Kong que se enfrenta a una difícil misión: debe atrapar al capo de la droga del país. Pero para condenar al criminal solo hay una testigo que puede incriminarle y Kevin es el único que puede protegerla. Evidentemente todos los criminales a las órdenes del capo intentarán matar a la testigo y a su guardaespaldas

Ho y Mark pertenecen a la mafia y Kit, el hermano pequeño de Ho, es policía. Después de realizar un trato que sale terriblemente mal, Ho es detenido por la policía y Kit queda totalmente perplejo al conocer su verdadera identidad. Tres años después, Ho sale de prisión y se encuentra con un hermano que no quiere saber nada de él y un jefe de la mafia que quiere volver a hundirlo. Por suerte, Mark Lee está para ayudarlo.

Las hermanas Lynn y Sue son dos asesinas a sueldo que utilizan el último invento de su padre, un científico ya fallecido, para burlar los sistemas informáticos de seguridad de cualquier lugar en el que quieran entrar. Su último trabajo las pone en el punto de mira de la detective Hung, sin embargo, las tres acabarán uniendo sus fuerzas para resolver una compleja trama criminal.

Un disparo resuena en la calle. Un policía de paisano cae asesínado. Un sargento de policia arresta a un joven en el lugar de los hechos y le acusa de crimen. Dos policias de la sección contra el crimen no creen en la culpabilidad del muchacho.

Un tren muy especial acaba de salir de Shangai. Sus pasajeros son ricos comerciantes que viajan con sus esposas, realmente, unos blancos muy jugosos para cualquier ladrón. Pero el robo no llega a producirse, sino que se produce una situación totalmente distinta. ¡Parada obligatoria! Un extraño pasajero sabotea el tren y todos deben bajarse… en su pueblo natal. Allí tendrán que gastar grandes cantidades de dinero para poder salir con bien de ésta. Como la situación apremia, se forman los inevitables grupos, y se ven envueltos en robos de bancos, pugnas entre samurais y peleas territoriales entre bandas callejeras.