Una joven, Lucecita, pasea por el campo cuando decide darse un baño en el río. Gustavo Gonzalves, un rico hacendado la observa desde los matorrales. Cuando Lucecita regresa a su cabaña encuentra a Rosa, su madre, casi al borde de la muerte. La mujer le comunica que deben ir a Lima, la capital, donde las acogerá su amiga Modesta, que es sirvienta en una gran mansión en la que vive Gustavo. El patriarca, Miguel Mendoza, está casado con la altiva Graciela y tiene una hija, Angelina, que es la esposa de Gustavo y está postrada en una silla de ruedas. Angelina se queja de que su marido no le presta atención y Gustavo le confiesa a Álvaro, su abogado, que solo la compasión le retiene al lado de su esposa. Tras la muerte de Rosa, Lucecita entra a trabajar en la mansión, sin saber que allí vive Gustavo y que Miguel es su padre.

La historia comienza a principios del siglo XX en una hacienda algodonera del Perú. Leandra (Ana Colchero), una bella campesina, queda embarazada de su patrón, Andrés Linares, cuya esposa, Rosario, no puede tener hijos. Meses después, Leandra da a luz dos niñas gemelas a las que la madre de Andrés, Doña Gertrudis de Linares, intenta robar. La criada logra huir con una de ellas y encuentra refugio en la casa de la distinguida familia Riveau, que adopta a la pequeña y la llama Clara y da empleo a Leandra como ama de llaves. La otra niña es adoptada por Andrés y Rosario y recibe el nombre de Isabella.

De Vuelta al Barrio es la historia de Malena y Pichon... una historia que no tuvo final cuando ella decidió plantarlo en el altar hace muchos años, ambientada en los años setenta que busca recrear esa época sin perder la comedia y drama. Personajes entrañables que nos muestran un tiempo donde era más simple vivir.