Al acabar con la vida de Jean Senac el 30 de agosto de 1973 en Argel, sus asesinos creyeron que lo silenciarían para siempre. Se equivocaron ya que su voz cada día es un poco más fuerte. Testigos de esta locura: la publicación de la obra completa de este gran poeta, las innumerables conferencias y retransmisiones radiofónicas dedicadas a él y, finalmente, la producción de películas como "Jean Sénac, el herrero del sol". Los testimonios conmovedores y abrumadores de quienes lo conocieron, los archivos cinematográficos inéditos, la voz generosa del poeta en la radio, el descubrimiento de sus viajes en los territorios de la poesía y la política hacen de esta película un documento precioso sobre la vida de Jean Senac. .