El caso del asesinato de dos niñas, treinta años atrás, vuelve a reabrirse y los brutales secretos del pasado salen a la luz. Correcto thriller policíaco, basado en una novela original de David Stout titulada "Carolina Skeletons". Treinta años después del asesinato de dos niñas, se vuelve a reabrir el caso y, como es de suponer, habrá más de una sorpresa. El afroamericano Louis Gossett Jr., conocido sobre todo por su Oscar al mejor actor secundario en "Oficial y caballero", es el protagonista de la función, interpretando al policía encargado de la investigación del caso. Nada nuevo que aportar por parte de este film producido directamente para la televisión. En todo caso, entretiene.

Edna Mae McCauley es una mujer mayor que vive en una pequeña ciudad de Kansas. Ella queda herida después de un accidente y además, su marido muere en este incidente. Luego, Edna comienza a experimentar una experiencia muy cercana a la muerte y se va a vivir con su abuela ocupándose de su familia. Más tarde, Edna asiste a una ceremonia en la que un niño sufre de una fuerte hemorragia. Cuando Edna abraza al niño, todos se dan cuenta de que aquella hemorragia había sido curada. Edna se da cuenta de que tiene el poder de curar a las personas, además esto le ayudaría a salir de un estado paralítico en el cual ella había quedado después del accidente. Finalmente, Edna logra curar a otras personas, incluyendo al carpintero Carl. Este cree que ella tiene la capacidad de una señal de Dios. Pero Edna cree y declara que puede sanar a las personas a través del amor.