Las montañas del centro de Japón. Para pagar los gastos médicos para el tratamiento de la enfermedad de su madre, Yuku acepta un contrato lucrativo para matar a un extraño ciervo blanco que vive en el bosque en un pueblo remoto, y cuya presencia se cree que socava el turismo en la región. Sin embargo, cuando se aventura en el pueblo, descubre que el animal es venerado como un dios por la comunidad local, que vive en un estado de semi aislamiento del resto de la sociedad. Mientras evalúa sus responsabilidades éticas al llevar a cabo tal tarea, se acerca a los habitantes de la aldea, enfrentando sus emociones conflictivas sobre si deben seguir viviendo como "forasteros".

El rodaje de una película de zombies en un almacén abandonado en el que se habían realizado experimentos militares se ve torpedeado por la irrupción de… ¡zombies! Estamos en el terreno del cliché, pero nada en One Cut of the Dead es lo que parece a primera vista. Con un plano secuencia de más de media hora y con un tono de humor desmadrado, esta adorable zomedia da una nueva vida al cine de no-muertos.

Tras el éxito de One Cut of the Dead, el equipo vuelve a ser contratado seis meses después para rodar otra película de zombies, pero esta vez en Hollywood.

El elenco y el equipo del "One Cut of the Dead" original se unen a través del chat de video para ayudar a Higurashi a crear un cortometraje sobre un caso de crimen real durante el encierro.