La trama gira en torno a cómo un joven Bryan Mills es reclutado por la CIA tras salvar un tren lleno de pasajeros. Tras este suceso, donde pierde a alguien muy importante para él, decide comenzar a desarrollar sus habilidades para ser capaz de salvar todas las vidas inocentes que pueda. Así, se convierte en un agente implacable que hará todo lo que esté en su mano para luchar contra el crimen.

Cada episodio se centra en un desastre aéreo, primero dando al público la sensación de estar en el avión y luego explicando por qué se produjo el accidente. La serie brinda a los tele-espectadores tanto la sensación visceral del desastre como la explicación racional de lo que sucedió y qué derivó la industria de la aviación como aprendizaje a raíz del accidente.

Nos encontramos con Sarah, una joven huérfana sin ningún sitio donde caerse muerta que es testigo del suicidio de una chica que es idéntica a ella. Sarah decidirá asumir su identidad, cuenta bancaría, hogar y demás solo para encontrarse en medio de una tremenda conspiración con clones de por medio.

En este drama, cuya primera temporada rodada en Toronto consta de 10 episodios, seguimos la vida de un ex profesional del hockey llamado Matt Shade (Priestley) que cambia su vida irrevocablemente cuando decide formar equipo con Angie Everett (Sampson) para formar una agencia de detectives.

Un avión Boeing 767 llega al aeropuerto neoyorquino JFK y, tras tomar tierra, para en seco en mitad de la pista de aterrizaje. No hay luces y los canales de comunicación no funcionan, es como si no hubiese vida dentro del avión. Al principio todo parece que es a causa de un virus mortal e incluso un atentado terrorista, pero pronto se descubre que es por algo mucho más aterrador. Todos los pasajeros afectados están sedientos y lo único que quieren consumir es sangre. El contagio avanza de forma vertiginosa y en pocos días todo Manhattan está infectado. Los antiguos vampiros han vuelto con un amenazador propósito, quieren hacerse con el control del mundo.