En 1937 el veterinario recién titulado James Herriot (Simon Ward) viaja a Yorkshire para solicitar el puesto de ayudante en la consulta de Siegfried Farnon (Anthony Hopkins), donde aprenderá a adaptarse a la vida rural mientras se esfuerza en superar el escepticismo con que la comunidad local contempla sus habilidades.

Muestra la realidad de la vida durante los ataques aéreos de la Segunda Guerra Mundial sin nada del tradicional 'espíritu Blitz' representado con tanta frecuencia. Eric pasa las noches hacinado en un refugio de ladrillos con su padre, su hermana y sus hijos que gritan, y cada bombardeo hace llorar por la pérdida de su madre en una redada anterior. Cuando se entera de que van a evacuar a su amada, finalmente cede bajo el estrés.