El agente del departamento especial "Piraña" Kirill Mazur y su colega Olga van al norte con la misión de liquidar un laboratorio de armas secretas submarinas bajo la apariencia de unas vacaciones. De repente, se encuentran en el mundo donde las leyes de la civilización se olvidan, y las mortales armas son guardadas por unos gángsters que son controlados por un nuevo "maestro de la taiga": Prohor, cuyo tiempo libre se dedica a la caza de humanos.

Es la historia de una joven que no se da cuenta de que está bajo vigilancia las 24 horas, los 7 días de la semana. Un día al llegar a casa es secuestrada. Los secuestradores la mantienen en un viejo garaje, le hablan a través de un altavoz y establecen reglas estrictas: no debe dormir, sino que tiene que cumplir tareas extrañas que le han preparado.