En 1956 en Francia, un sacerdote es asesinado y parece que un mal se está extendiendo. La hermana Irene una vez más se encuentra cara a cara con una fuerza demoníaca.

Bill Baker (Matt Damon) es un rudo operario de una plataforma petrolera estadounidense que viaja a Marsella para visitar a su hija, en prisión por un asesinato que afirma no haber cometido. Lejos de casa, las cosas no serán nada fáciles para un padre dispuesto a todo para demostrar la inocencia de su hija.

Vincent Martin es testigo del asesinato de una mujer frente a un semáforo al recibir un empujón. Cuando su mejor amigo le encuentra aturdido por lo sucedido, le aconseja no declarar como testigo.