El detective Ma Seok-do cambia su afiliación de la comisaría de Geumcheon al Equipo de Investigación Metropolitana, para erradicar a los gánsteres japoneses que ingresan a Corea para cometer crímenes atroces.

Jang Chen llega de China y trabaja como prestamista en una sórdida zona de Chinatown en Seúl. Está respaldado por sus esbirros sanguinarios Wei Sung-Rak y Yang-Tae. Mientras tanto, Ma Suk-Do es un detective en el área de Chinatown de Seúl. Él trata de mantener la paz, mientras que dos pandillas chino-coreanas luchan por el poder.

El «policía bestia» Ma Seok-do se dirige a un país extranjero para extraditar a un sospechoso, pero poco después de su llegada, descubre otros casos de asesinato y se entera de la existencia de un despiadado asesino que lleva varios años cometiendo crímenes contra turistas.

So-hee disfruta de su aparentemente perfecta vida de recién casada con su aparentemente perfecto marido. Por ser tan perfecta, empieza a sospechar que su marido no es lo que parece.

Un director con dificultades hace un intento desesperado por profundizar en la leyenda urbana sobre una película filmada por un fantasma, arriesgando su propia vida.