Ray Drecker es un cuarentón que ve cómo su vida se desmorona: su mujer le ha abandonado por un tipo repelente, dejándole a cargo de sus hijos y para colmo, su casa acaba de incendiarse y no dispone del dinero suficiente para pagar las reparaciones. Pero algo cambia en la vida de Ray tras el reencuentro con Tanya, un antiguo ligue. En un último intento por cambiar su suerte, y persuadido por su amiga, Ray decidirá ganarse un sueldo extra utilizando lo que considera su 'mayor talento': su pene, de grandes dimensiones, le abrirá las puertas para convertirse en 'chico de compañía' con la ayuda de Tanya que actuará de improvisada proxeneta.

Ray Drecker es un cuarentón que ve cómo su vida se desmorona: su mujer le ha abandonado por un tipo repelente, dejándole a cargo de sus hijos y para colmo, su casa acaba de incendiarse y no dispone del dinero suficiente para pagar las reparaciones. Pero algo cambia en la vida de Ray tras el reencuentro con Tanya, un antiguo ligue. En un último intento por cambiar su suerte, y persuadido por su amiga, Ray decidirá ganarse un sueldo extra utilizando lo que considera su 'mayor talento': su pene, de grandes dimensiones, le abrirá las puertas para convertirse en 'chico de compañía' con la ayuda de Tanya que actuará de improvisada proxeneta.

Un grupo de amigos deciden convertir su pasión por el terror y el gore en un negocio bastante particular: proporcionar escenas terroríficas a los clientes que así lo pidan.

Kate y Michael son dos grandes amigos desde que se conocieron en la escuela especial para sordos en Los Ángeles. Ambos tienen sus vidas independientes, Kate es una entusiasta organizadora de eventos en una empresa de relaciones públicas que se acaba de comprometer con su novio Danny, un oyente que no se esfuerza demasiado por aprender el lenguaje de signos y que se encuentra en una complicada tesitura laboral que oculta a su novia. Por otro lado Michael es un dibujante de cómics de cierto éxito, que se encuentra sumido en una enorme crisis personal tras la ruptura con su novio Ryan, lo que le lleva a una espiral de relaciones de riesgo y drogas con un enorme bloqueo creativo que le está afectando mucho en su faceta profesional.

Ray Drecker es un cuarentón que ve cómo su vida se desmorona: su mujer le ha abandonado por un tipo repelente, dejándole a cargo de sus hijos y para colmo, su casa acaba de incendiarse y no dispone del dinero suficiente para pagar las reparaciones. Pero algo cambia en la vida de Ray tras el reencuentro con Tanya, un antiguo ligue. En un último intento por cambiar su suerte, y persuadido por su amiga, Ray decidirá ganarse un sueldo extra utilizando lo que considera su 'mayor talento': su pene, de grandes dimensiones, le abrirá las puertas para convertirse en 'chico de compañía' con la ayuda de Tanya que actuará de improvisada proxeneta.