El futuro. En la ciudad de Shit City, el gobierno se quiere hacer con el monopolio de la última fuente de energía: los excrementos. Las autoridades se encargan de racionar tan preciada materia, cosa que no sienta bien a más de un adicto. Una tropa de bebés fuera de la ley, un cyborg policía y sobretodo los antihéroes Aachi y Ssipak son los protagonistas de esta irreverente fábula futurista.

Narra la historia de Eun-shik, un estudiante locamente enamorado de una chica, y que, a pesar de todos sus esfuerzos para estar con ella, se encuentra siempre en situaciones de lo más enrevesadas, todo ello ayudado de su grupo de amigos, a cada cual más loco y pervertido.

El miembro de una banda de gángsters huye con un valioso botín de diamantes terminando por casualidad en un pequeño pueblo llamado Sisily, donde pedirá ayuda a los pocos habitantes que allí viven. Pronto llegarán parte de sus antiguos compañeros, que le buscan a él y a las joyas

En un zona marginal a las afueras de la gran ciudad de Seúl, un hombre llega con la intención de desalojar a la pobre gente que vive en el lugar para que así sus jefes puedan construir un complejo de edificios de lujo. Pero sus planes se ven poco a poco derrumbándose cuando conoce las necesidades de esa gente. Entre los que se encuentran una joven aspirante a campeona de asia de Boxeo, otra joven que quiere ejercer en el mundo del marketing y unos niños huérfanos que viven únicamente con su abuelo.

Defensor del sexo, pero no del matrimonio, el soltero Daegyu (interpretado por el cantante convertido en actor Im Changjeon), de 26 años, produce álbumes de música piratas para ganarse la vida. Un día, se encuentra con un valiente niño de nueve años llamado Jeon Ingwon (interpretado por Lee Inseong) que insiste en que es el hijo de Daegyu nacido fuera del matrimonio. Daegyu intenta todos los medios posibles para enviar al audaz muchacho de regreso a su lugar de origen, incluso denunciarlo a la policía, abandonarlo en la calle e incluso fingir no haberlo conocido, pero sin éxito. Ingwon le hace una oferta a Daegyu: lo dejará para siempre si primero viajan juntos por el país. Durante el viaje, Daegyu se entera del secreto de Ingwon y encuentra una razón para no continuar su viaje.

Ambientada en la década de 1980, el hijo mayor de una familia pobre decide mudarse a Seúl para convertirse en maestro. Sin embargo, tan pronto como llega a la ciudad, le roban el dinero y pierde sus maletas. Se las arregla para llegar a un pueblo remoto, donde casualmente estaban buscando un nuevo maestro para los niños del pueblo. Pronto se enamora de una mujer allí, pero su origen parece vago ya que la gente del pueblo solo dice que ella viene de algún lugar del norte. Resulta que la gente del pueblo se ha estado comunicando con otro pueblo limítrofe en Corea del Norte a través de un túnel secreto que los conecta.